¡Bienvenidos de nuevo a Cultinfo! En nuestra primera entrada, mencionamos que comenzaríamos con los conceptos más básicos y, poco a poco, nos adentraríamos en temas más técnicos. Hoy, daremos un paso más y exploraremos la ciencia detrás de la fotosíntesis.
La investigación sobre la fotosíntesis comenzó temprano en la historia de la biología. En la década de 1770, los primeros experimentos demostraron que la fotosíntesis solo ocurre en las partes verdes de las plantas y que requiere luz solar, dióxido de carbono (CO2) y agua (H2O). También se observó que la fotosíntesis produce oxígeno (O2) como producto intermedio. Hasta aquí, nada que no supiéramos.
Para principios de la década de 1840, los científicos ya sabían lo suficiente sobre este proceso como para proponer que la fotosíntesis permite a las plantas convertir la energía lumínica en energía química, que se almacena en los enlaces de los carbohidratos. La ecuación global de la fotosíntesis se estableció así:
CO₂ + 2H₂O + Energía luminosa → (CH₂O)ₙ+O₂+H₂O
En esta ecuación, (CH₂O)ₙ representa un carbohidrato genérico, donde el subíndice “n” indica que distintos carbohidratos tienen diferentes múltiplos de . Básicamente, la energía de la luz se transforma en la energía química de los enlaces C-H y C-C de los carbohidratos. Cuando el carbohidrato producido es la glucosa, la reacción se puede escribir de esta manera:
Al observar esta reacción, nos damos cuenta de algo: es el reverso de la respiración celular. Mientras que la fotosíntesis convierte el dióxido de carbono en glucosa y otros azúcares, la respiración celular hace lo contrario: convierte la glucosa en dióxido de carbono, liberando energía en forma de ATP. Ya hablaremos en futuros posts de la respiración celular y cómo complementa el proceso de la fotosíntesis.
Pero, ¿cómo ocurre la fotosíntesis exactamente? Inicialmente, los investigadores asumieron que el CO2 y el H2O reaccionaban directamente para formar , y que los átomos de oxígeno del dióxido de carbono se liberaban como gas oxígeno (O2). Ambas hipótesis resultaron ser incorrectas. En las próximas entradas, exploraremos por qué y desentrañaremos los detalles de este proceso vital para la vida en la Tierra.
¡Nos vemos en la próxima entrada para seguir aprendiendo juntos!